Ferran Bonet, bajista de Bullit, nos dejó hace un par de años. Desde entonces rondaba en el gremio de músicos que compartían amistad con él y su banda un homenaje a su altura y éste tuvo lugar el sábado 4 de marzo. Cinco bandas afines, más los propio Bullet, protagonizaron el cartel del Ferrish Fest, como acto principal, acompañado por la mañana de una sesión vermouth y por la noche, después de las actuaciones, de un after party en Trash Can.

Abrían fuego desde la Costa Brava Bad Mongos, los problemas técnicos de primera hora y el acceso de público a sala no amedrentaron a estos seguidores del punk´n´roll. Canciones entrelazadas tocadas a toda velocidad y principalmente de su reciente “Shoot the Bullet”. Santi García y No More Lies desplegaron toda la fuerza del postcore contenida en sus canciones, durante cuarenta minutos hicieron resucitar y bramar sus instrumentos con gran intensidad. G.A.S. Drummers arrancaron los primeros pogos de la tarde con su hardcore melódico y punk rock acelerado aprovechando para repasar sus dos décadas de trayectoria a pie de escenario. Minor Empires aportaron la visión más pausada, profunda, melódica y sosegada, escorados al postrock, siempre con la característica voz de Juan Blas. The Unfinished Simpathy son unos grandes de la independencia, saben combinar la fuerza del rock underground con píldoras melódicas convirtiéndoles en grupo que atrae con cada canción que interpreta su repertorio. Y concluyeron, como no podía ser de otra manera, Bullitt, otra formación amante de las guitarras potentes y afiladas con el buen gusto por las buenas melodías. Toda una demostración de saber estar y hogar del homenajeado de la noche.

Autor: Rafa Garcí­a-Moreno